sábado, 3 de octubre de 2015

Hablando del ayuno . Programa de Radio


El Ayuno . Programa de Radio
Ensayo preparado para la clase de Formación Espiritual en el Curso de Pastoral Juvenil


--

¡Bienvenidos ésta tarde a su programa,
“Preguntando algo que sé, que no sé, pero debería saber”!

El día de hoy tenemos un tema súper importante, que todos los creyentes y cristianos sabemos que nos beneficiaría practicar pero no lo hacemos, y no sabemos porque.

¡El día de hoy hablaremos del AAAAAYUUUUUUNOOOOO!

-          Vamos a línea número 1; ¡Buenas tardes! ¿Cómo estás?
-          Buenas tardes, muy bien gracias a Dios, ¿Y tú?
-          Muy bien también; ¿Cuál es tu nombre?
-          Luis
-          Excelente Luis y, ¿Tienes mucho tiempo en la Iglesia?
-          Si, bueno, he ido desde pequeño a las Escuelitas Bíblicas, me gustó el rollo, luego entré al grupo de adolescentes y hoy que ya tengo 18 ahí sigo.
-          Qué bueno saber eso de ti, pero a ver, cuéntanos: “que sabes, que no sabes, pero deberías saber acerca del ayuno”
-          Bueno, la verdad es que he escuchado muchas veces que en la Iglesia mencionan que debemos ayunar, pero la verdad es que ni siquiera sé que es eso. ¿Podrías explicarme?
-          ¡Claro que sí! Trataré de ponerlo en términos fáciles.
Ayunar es SUSTRAER -quitar, alejar, restar, apartar- UN BIEN FÍSICO, que principalmente es la comida, a fin de OBTENER UN BIEN ESPIRITUAL -una respuesta, milagro o bendición de Dios-.
-          Ah! O sea, ¿Dejo de comer y Dios me bendice?
-          Bueno, en términos prácticos eso es lo que sucede, pero en términos espirituales va mucho más allá.
No sólo dejamos de comer, sino que “nos apartamos de lo físico que nos atrae y mantiene ocupados, para acercarnos a lo espiritual, que muchas veces tomamos poco en cuenta”
Y… si llevas tiempo en la Iglesia, me imagino que sabes qué sucede cuando estamos más cerca de Dios.
-          Si, ¡Claro! Dios nos bendice más. Y podemos aprender más de Él.
-          ¡Exacto! Entonces, tu duda ¿quedó resuelta?
-          Creo que sí, me separo un tiempo de lo que mi cuerpo pide, para acercarme a lo que, entiendo, que mi espíritu pide. Y así encuentro más fácil a Dios.
-          Excelente Luis, fue un gusto recibirte hoy en “preguntando algo que sé, que no sé, pero debería saber”. Línea número 2, ¿A quién tenemos por ahí?

-          ¡Hola! Soy Violeta.
-          Hola Violeta, ¿Cuántos años tienes?
-          Tengo 32 años. Felizmente casada y con dos hijos. De hecho, creo que se alcanza a escuchar el ruido, jejeje.
-          ¡Muy bien Violeta! Pues, ¡Bienvenida!
-          A lo que vamos, “¿qué deberías saber pero no sabes acerca del ayuno?”
-          Bueno, llevamos poco en la Iglesia, Dios ha transformado nuestro matrimonio y nos dio esperanza. Los niños se sienten contentos y estamos en un proceso de crecimiento desde hace aproximadamente un año y medio.
-          En mi grupo pequeño nos han hablado de que debemos ayunar pero la verdad es que no sabíamos ni qué es eso, aunque la verdad nos ayudó escuchar la respuesta a la pregunta anterior, pero tenemos, mi esposo y yo, otra duda. Y bueno, no quiero sonar grosera pero, la duda es muy simple: ¿Por qué debemos ayunar?
-          ¡Wow! Excelente pregunta Violeta.
-          Creo que hay muchos que no tienen esa respuesta, pero no tienen las agallas de hacer la pregunta. Trataré de responder lo más claro posible.
Te compartiré al menos 4 puntos que creo importantes acerca del porqué debemos ayunar. ¿Lista?
-          Sí, estamos listos.
-          Muy bien.
Número 1, ayunamos porque es una disciplina que Jesús, nuestro maestro, practicó. Y lo más interesante es conocemos que lo hizo justo antes de iniciar formalmente su ministerio, preparándose para los tiempos buenos y difíciles que vendrían a su vida.
Número 2, ayunamos porque nos acerca al poder de Dios. En una ocasión unos discípulos no pudieron sacar un demonio que había en un hombre y el maestro les dijo: “bueno, tranquilos, esto no sale sino con oración y ayuno”.
Número 3, ayunamos porque así demostramos que tenemos el control sobre nuestro cuerpo. ¿Sabes? Constantemente hay una lucha entre cuerpo y espíritu llevándose a cabo en nuestro interior. Y a través del ayuno podemos demostrar que, dejamos de pensar sólo en lo físico y podemos concentrarnos en lo espiritual, como mencioné en la llamada anterior. Y, no se trata de que “nos alimentemos de espíritu”, sino de que en tiempos determinados, demostremos a nuestra “carne” que tenemos el deseo de no satisfacerla para satisfacer a nuestro espíritu y acercarnos más al Padre.
Y por último el Número 4, ayunamos porque nos ayuda a crecer espiritualmente. El ayuno, como también mencioné antes, no sólo consiste en no comer, sino en un proceso que nos lleva a que en el tiempo en que dejamos de concentrarnos en comer, nos concentremos en Dios. Y si nos concentramos en Él, en buscar su presencia, en aprender más de Él, en recibir algo nuevo de Él. Seguramente nuestro espíritu crecerá.
¿Qué te parece?
-          ¡Wow! Nunca lo había visto así. Aún creo que debo aprender más pero, al menos estoy más convencida de que es algo bueno, porque lo practicó Jesús y me acerca más a Dios.
-          Perfecto, te quedaste con algunos puntos y bueno, eso es lo que tratamos de hacer en éste programa. Compartir algunas respuestas a temas que en muchas ocasiones no queremos preguntar en la Iglesia. Y bueno, con respecto a lo último, déjame te digo que no sólo Jesús lo practicó, hay una lista grande de personajes bíblicos, con historias impresionantes que ayunaron, está Moisés, David, Daniel, Esther, Pablo, Nehemías, Elías y muchos más. Así que, de que tenemos referencia, la tenemos.
-          ¡Muchas gracias! Me encanta éste programa porque, intentas explicarnos las cosas de manera sencilla. “Échale” ganas, ¡Gracias! Ya tengo que hacer la cena.
-          ¡Hasta pronto Violeta! Saludos a tu familia y ¡buen provecho! Luego nos invitan, jajaja.
-          Con gusto! Jajaja. ¡Adiós!
-          Nos queda tiempo para una pregunta más, Línea 1, Línea 2, ¿Hay alguien?
-          ¿Hola?

-          Línea 2, ¡Hola! ¡Hola! ¿Con quién tengo el gusto?
-          ¡Hola! Con Roberto.
-          Hola Roberto, ¿Cómo estás? ¿Qué piensas de todo esto del ayuno? Hay algo que ¿sabes que no sabes pero deberías saber?
-           Hola, bueno, sí. Hay una duda. En un curso que fui hace poco hablaron de ayunar de “otras cosas”. Ayuno de tele, de internet. ¿Es esto posible? ¿Tú que piensas?
-          Bueno, sí, es un tema bastante extenso y creo que necesitaríamos más tiempo pero trataré de responderte en breve y seguramente tendremos que tener otro día de programa con éste mismo tema.
Partiendo del principio en que ayunar es “SUSTRAER UN BIEN FÍSICO PARA OBTENER UN BIEN ESPIRITUAL” algunos líderes han dado esas sugerencias que tu escuchaste y en lo personal no escucho tan descabelladas.
¿Sabes? La vida que hoy tenemos es demasiado agitada en nuestra ciudad y hay muchísimas personas que, o no tienen horarios de comida fijos, o bien sólo hacen una o dos comidas fuertes al día. Y bueno, esto, aunque es un hecho que no es saludable, es la forma de vida de ellos por el movimiento que tienen diario.
Partiendo de esas dos cosas, pienso ¿Qué pasaría si en esa vida tan agitada que llevan, aparte, no comen?
Ahora bien, ellos tal vez no tienen tiempos fijos de comer, pero constantemente están ocupados viendo sus redes sociales, o asistiendo a reuniones donde su espíritu y vida cristiana se ve en riesgo, o bien con amigos que en lugar de inspirarlos los están alejando de Dios.
Yo personalmente creo que sería bueno para ellos sugerirles “SUSTRAERSE, alejarse, apartarse, ayunar” eso en algún tiempo de sus vidas, a fin de “ACERCARSE, concentrarse, enfocarse” en la presencia de Dios.
¿Me explico?
Ya nos queda poco tiempo de programa, pero lo digo otra vez así, creo que el hecho de “no satisfacer los deseos de la carne, como estar todo el tiempo con amigos, en fiestas, o en internet, o viendo la tele”, a fin de acercarnos a Dios, podría contar como un ayuno en cuanto a la fórmula se refiere.
ME ALEJO DE LA “CARNE” Y ME ACERCO A DIOS.
¿Cómo ves?
-          Suena interesante, donde lo escuché sólo lo plantearon pero no explicaron nada y me dejaron un poco sacado de onda.
-          Me gustaría compartir más acerca de esto pero lamentablemente se nos acaba el programa pero, qué les parece si dedicamos ésta semana a estudiar la palabra y preguntarle a nuestros líderes acerca de éste tema.
Y bueno, creo que podría ser un buen reto, dedicar algún tiempo de ayuno y que la próxima semana recibamos alguna llamada de “qué experimentaron al hacerlo”.
-          Creo que sí lo voy a hacer y seguramente marcaré la próxima semana.
-          ¡Muchas gracias Roberto! Gracias por acompañarnos y estar al pendiente.
Y gracias a todos los que atentamente nos acompañaron, ha sido un gusto y verdadero placer compartir éste tiempo.
Nos escuchamos la próxima semana aquí en su programa “cosas que sé que no sé pero debería saber”.

Mi nombre es Jony Bernal, y recuerden,
Si dejas de soñar y de aprender, dejas de vivir.

¡Hasta la próxima!