jueves, 4 de enero de 2024

Jesús es... el Señor

Título: Jesús es... El Señor

Serie: Jesús es...
* Sermón predicado el domingo 31 de Diciembre de 2023 a la Iglesia "Church on the Hill - Latino"

Pastor: Pbro. Jony Bernal

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Jesús es… el Señor


Qué alegría estar juntos una vez más!


Ha sido una buena noche en la que hemos tenido la oportunidad de cenar juntos, de cantar y de escuchar testimonios de lo que Dios ha estado haciendo en nuestras vidas.


Estamos, a menos de dos horas de que se termine el año 2023 y hay algo que quiero compartir contigo desde hace algunas semanas.

Es una pregunta que está en mi mente y que me ha provocado acercarme a Dios de una manera distinta.


Durante el último mes estuvimos aprendiendo acerca de Jesús en esta serie.

Aprendimos que Jesús es Hombre y eso le permite identificarse con nosotros y a nosotros nos permite identificarnos con él.

Aprendimos que Jesús es Sacerdote y que es nuestro representante ante Dios y el representante de Dios para nosotros.

Aprendimos que Jesús es Rey y que merece nuestra adoración.

Aprendimos que Jesús es el Salvador quien decidió venir al mundo por amor a nosotros para salvarnos de nuestros pecados.


Pero lo que quiero compartir hoy literalmente me ha dejado en shock.

Es algo muy simple pero al mismo tiempo muy profundo.


Ésta noche hablaremos de Jesús como Señor.


Déjame leer un pasaje de la Biblia que está en Lucas 2:11

"Hoy ha nacido en la Ciudad de David un Salvador, que es Cristo el Señor".


Oremos.


La pregunta difícil en mi mente durante las últimas semanas es la siguiente:

¿Es Jesús mi Señor?


Déjame hacer la misma pregunta para ti,

¿Es Jesús tu Señor?


Mientras he pensado en esta pregunta durante las últimas semanas, muchas ideas han venido a mi cabeza.


En primer lugar pensé:

Todo mundo disfrutamos a Jesús como Salvador.

A todo mundo le encantan los Salvadores.


En los últimos 10 años, si eres fan de las películas de Superhéroes como yo, hemos tenido la oportunidad de ver cómo éstos "super humanos" tienen la capacidad de salvar a las personas de las crisis que están viviendo.


Ellos simplemente llegan, toman el control de la situación, salvan del peligro a la persona en necesidad y se van.


Si otra crisis vuelve a ocurrir, el patrón es el mismo, ellos llegan, toman el control de la situación, salvan del peligro a los necesitados y se van.


Entonces, déjame profundizar un poco más en esta idea.

Qué hace la persona en crisis para ser salva?

Nada.

Bueno, tal vez correr y gritar por ayuda, pero al final, no hace nada.

Qué hace el "superhumano"?

Todo. Llega, controla la situación, lucha con los malos, o evita el peligro, o hace una buena obra por la persona en necesidad y al final lo deja viviendo otra vez "bien". Es decir, con la situación controlada.


Qué hace el hombre?

Nada.

Qué hace el "Super humano”?

Todo.


Entonces, mientras meditaba en esto, una idea increíble vino a mi mente.

Qué genial es tener a Jesús como Salvador! ¿No crees?

A todos nos encanta que Jesús llegue cuando le pedimos auxilio y nos saque de la crisis en la que estamos y nos salve.

Nos encanta que Él haga todo.


Y eso es genial! No me malinterpretes. No estoy diciendo que eso está mal.

Pero la conversación de esta noche es un poco más profunda.


Jesús vino a este mundo no solo para ser nuestro Salvador sino también para ser nuestro Señor!


Podemos leer eso ahí en Lucas 2:11

Hoy ha nacido en la Ciudad de David un Salvador, que es Cristo el Señor.


Entonces me pregunto:

Qué significa creer en Jesús, el Cristo, el Mesías, como Señor?


En el pasaje de Lucas 2:11 la palabra Señor viene de la palabra Griega "Kyrios".

Kyrios tiene un significado que es interesante que conozcamos esta noche:

Dueño


Entonces, cuando decimos que Jesús es nuestro Kyrios, es decir que Jesús es nuestro Señor, también estamos diciendo:

Jesús es mi dueño.


¿No te parece interesante?

Al considerar estas palabras, me he puesto a pensar mucho en lo que significaba tener un Señor, un amo, un dueño, en el tiempo en que la Biblia fue escrita.


En los tiempos antiguos era aceptable que una persona tuviera los derechos de vida sobre otra.

Es decir, había personas que eran Kyrios de otros, es decir, eran dueños de la vida de otros.


Entonces, podemos observar en la Biblia que había los Señores y los siervos.

Unos eran los Kyrios y otros los Doulos.


El Kyrios tenía el poder de solicitar que el Doulos hiciera lo que se le pedía porque su vida le pertenecía.


Ahora bien, déjame ahondar un poco más en la palabra Doulos

Doulos es una palabra que encontramos hoy al leer la palabra "Siervos" pero la realidad es que en el original, la palabra Doulos, realmente significaba “esclavo".

Es decir, cada vez que leemos la palabra siervo en la Biblia lo que debe decir es “esclavo”.


Alguien que era Doulos era un esclavo, alguien que le pertenecía a otro, de por vida.


Hay una diferencia grande entre un servidor y un esclavo.

Un siervo tenía el derecho de servir a quien quisiera.

Un esclavo tenía la obligación de servir a su amo.


Puedes ver la diferencia?


Tal vez estás pensando que esto suena muy loco, o muy fuerte pero no es algo que yo me inventé.

Es algo que he estado reflexionando mucho en los últimos días y me hace pensar si realmente Jesús es mi Señor... O, dicho de otra manera, si realmente estoy dispuesto a ser un "esclavo" de Cristo?


Estamos a punto de entrar al año 2024 y es importante que reflexionemos juntos si estamos dispuestos a reconocer a Jesús como nuestro Salvador pero también como nuestro Señor.


Te voy a leer unos pasajes de la Biblia que tal vez ahora te van a sonar un poco diferentes:


Juan 14:15

15 »Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos.


Jesús dice que si realmente lo amamos, obedeceremos sus mandamientos.


Déjame preguntarte, ¿Es Jesús tu Señor?


A ver, repasemos un poco ¿Cuáles son los mandamientos que Jesús nos dejó?

Amar al Señor nuestros Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma, con toda nuestra mente y con todas nuestras fuerzas. Ese es el primero.

Y el Segundo dijo: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.


¿Estás obedeciendo lo que Jesús, el Kyrios, te ha encomendado?


Vamos a un pasaje más:


Juan 15:12-14

12 Y este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros como yo los he amado.

13 Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos.

14 Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando.


Te suena un poco diferente a como lo habías escuchado antes?


Ahora, vamos a analizarlo:

Jesús, el Señor, el Kyrios, el amo, el dueño, nos deja un mandamiento.

El mandamiento no es tan complicado, simplemente dice: "Que se amen los unos a otros como yo los he amado".


Entonces, ¿Qué deberíamos de hacer?

Amar a otros.

Eso es lo que el Kyrios, nos está ordenando.


Ahora bien, este pasaje tiene un plus.

A pesar de que Jesús es el Señor, él nos dice: Si hacen lo que les mando les llamaré "Amigos".


¡Que interesante Señor!

Alguien quien teniendo el derecho sobre mi vida, está dispuesto a llamarme amigo.


Pero bueno, volvamos al tema principal:

¿Qué te parece entender a Jesús como Señor de esta manera?

Creo que para muchos de nosotros es difícil aceptarlo como “Kyrios”, ¿no crees?

Porque todos preferimos a Jesús como Salvador.

Es fácil tener un Salvador.

Alguien que haga todo y que no nos pida nada.


Mira lo que dice el Apóstol Pablo en Romanos 10:9

"que si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo".


Para ser salvos necesitamos creer en Jesús con todo nuestro corazón, creer que Dios le levantó de los muertos y reconocer que Él es el Señor!


Pero el mismo Apóstol Pablo nos da un tip muy interesante en 1 Corintios 12:3

"...ni nadie puede decir: «Jesús es el Señor» sino por el Espíritu Santo"


Es decir, debido a que para muchos de nosotros algo difícil de aceptar, tú y yo necesitamos al Espíritu Santo para poder reconocer a Jesús como Señor.

Porque no es fácil.


No es fácil porque todos preferimos a un Salvador a quien podamos servir cuando queramos.

Nadie queremos a un Señor a quien tengamos que rendir nuestra voluntad.

No nos gusta que alguien sea el dueño de nuestra vida.


Todos preferimos solo a un Rey a quien adorar, pero nos cuesta pensar que tenemos un Rey a quien le pertenecemos y puede decidir sobre nuestra vida y nuestras pertenencias cuando Él quiera.


Todos preferimos a un Sacerdote que está dispuesto a presentar sacrificio por nosotros pero no queremos escuchar que el Sacerdote nos dice que nosotros mismos debemos ser el sacrificio vivo.


Todos queremos a un Jesús como hombre que nos entienda pero no es difícil aceptar que debemos vivir en Santidad como Él vivió.


Estamos a punto de entrar al 2024 y probablemente es el Sermón más difícil que me ha tocado predicarles hasta ahora.


Jesús es el Señor de este mundo.

Y solo Él sabe lo que vendrá para nosotros el día de mañana. 


Jesús es el Señor de Su Iglesia.

Así que lo que suceda con esta Iglesia en el 2024, será por su voluntad.


Jesús es el Señor de nuestra vida.

Así que es importante que estemos dispuestos a entregarnos completamente a Él.


Yo quiero ser muy intencional en este 2024 y estoy interesado en que Jesús sea mi Señor.

Que él dirija mis decisiones.

Que Él guíe mis pasos.

Que Él ponga palabras en mi boca cuando hablo.

Que Él ponga los pensamientos en mi mente en cada momento.

Que Él tome el control de mi trabajo, de mis estudios, de mi familia.

Que Él haga de mí lo que Él quiera y que yo pueda ser un siervo, un esclavo útil, para su honra y su gloria.


Sé que es un Sermón difícil.


Pero quiero preguntarte,

¿Estarías dispuesto a terminar el Año invitando a que Jesús sea el Señor de tu vida durante este 2024?


¿Estarías dispuesto a entregar todo de ti y dejar todo tu futuro en sus manos?


Oremos

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